martes, 16 de agosto de 2011

Zas, hasta el fondo

Bueno, lo he conseguido. Segundo día en el cole y ya he metido la pata... hasta el fondo.

Resulta que mi vena ingenieril hoy ha salido a flote cuando he visto el monstruo de fotocopiadora que tienen, básicamente éste:


Y resulta que se me ha encendido la sangre cuando la he visto y mi miniyo ha empezado a gritar: ¡datos, datos, opciones, menús! Y la parte de maestro le ha hecho caso. Mala decisión como veréis enseguida.

Resulta que me he empeñado en poder imprimir desde mi ordenador. Y como no lo he conseguido, he empezado a tocar botones, volver a probar, reinstalar... mientras mi compañera iba ordenando papeles (gracias, eres una santa) y yo lo intentaba así como quien no quiere la cosa.

Y mi orgullo ingenieril, cuando ha visto que no podía, después de varias intentonas ha dicho... venga, una última. Y buscando por los menús medio ocultos, ha encontrado una super opción. Y una parte me decía (como a la mona chita en Muchachada Nui): dale, dale. Y otra, ¡no, déjalo como está!

Y al final, ¿qué he hecho? Pues darle al botón. ¿Ves? ¡Mal, mal! Resulta que al darle al botoncito, la máquina se ha puesto a pedir un password y se ha bloqueado. Reinicié como Enjuto su ordenador... pero seguía el password. Siguiente opción: salir de allí para que nadie me viera. Pero... me han visto. Me he hecho el longuis y he vuelto a los 5 minutos a la escena del crimen. Sólo para encontrarme a una compañera diciendo: esto no funciona. Y han empezado a decir: ¡qué raro, si nunca pide contraseña!

El acojone ya ha sido mayúsculo. Había jodido la fotocopiadora del colegio, justo cuando, casualidad, todo el mundo necesita hacer fotocopias. Después de consultarlo con mi compañera y con Marga... he decidido confesar. Y aun a riesgo de volverme a España antes de tiempo por ñañas, he cantado. Se lo he dicho a una de las secretarias y me ha dicho que no me preocupara, que si no se podía usar otra fotocopiadora que hay en secretaría.

En fin, de vuelta a casa se me ha aparecido en sueños Pipe, con su sonrisa burlona y diciendo, muy despacito como dice él estas cosas: "Gilipollas". Y el mono a su lado que decía: "a joderse ñañas!!!" Y Andrés, por completar el trío sólo gritaba: "ÑOOOOOOO".

Ahora estoy en la biblioteca, sigo sin internet en casa. El segurata me mira mal, me quieren echar ya. Y he encontrado una solución, aunque no sé si dejarlo como está y que el colegio se quede sin fotocopiadora hasta que venga el del servicio técnico, o darle a la solución que he visto en todos los manuales. Mañana veremos.

Os dejo con el vídeo de la mona chita para que os deleitéis. Hoy me he acordado mucho de ella con sus arranques de ira y lo del "no lo toques, déjalo". Simplemente genial.

Voy a ver si termino bien el día.

Mi próximo post, desde Miami o Madrid, no lo sé.

ÑOOOOOOOOOOOO




No hay comentarios:

Publicar un comentario