Yellowstone es inmenso. Tiene una superficie de casi 9000 km2, un 10% más grande que toda la Comunidad de Madrid. Y una buena parte del Parque es una antigua caldera de un supervolcán, todavía activo. Por eso el paisaje típico de Yellowstone es bosque (lo que nos imaginábamos) mezclado con paisajes sacados del mismo Mordor (olor incluido).
En Yellowstone destacan 4 cosas:
1) Géiseres y zonas termales
Bajo Yellowstone sigue habiendo magma. Y mucha agua. Y si los juntas a los dos, el agua se calienta y se pone a hervir. Si la dejas salir tranquilamente, se forman piscinas calientes, que rápidamente son colonizadas por bacterias que dan al agua un color impresionante. Esta es la más famosa, pero como se te ocurra verlo desde la pasarela, olvídate. Necesitas un día de muuucho calor, y suerte con el viento para poder ver algo. Lo mejor, en el caso de esta piscina grande, es subir por una ruta que sale desde el aparcamiento de al lado (nosequé Falls). Y si hay sol, los colores se ven mucho más.
Si no dejas salir al agua, al final acaba explotando, formando géiseres. En la zona del Old Faithful (la vieja fiel) está la mayor concentración de géiseres del mundo (20%) que se pueden visitar en unas 2-3 horas con calma. Lo que es interesante es ver explotar al géiser. Muchos explotan cuando les sale del pie, pero otros como el Old Faithful lo hacen cada 60-90 minutos. Es la mayor atracción del Parque con motivo.
2) Animales salvajes
En una superficie tan enorme, variada y sin casi presencia humana sobreviven varias especies míticas de EEUU. El primero, el rey del Parque, el bisonte (no son búfalos, aunque los llamen así aquí). Los bisontes son como vacas grandes que están tan tranquilas pastando, se meten por donde les parece bien y no hacen nada, hasta que te metes con ellos, claro. Cada año hay más accidentes por ataques de bisontes que por ataques de osos.
Pensábamos nosotros que iba a ser difícil verlos. A los 5 minutos de entrar en el Parque ya habíamos visto de cerca un grupo. Y en los 3 días que estuvimos en el Parque los llegamos a tener a 1 metro del coche. Unas bestias enormes, pero con una pachorra proporcional a su tamaño.
En el mapa que te dan a la entrada vienen los principales animales que se pueden ver: bisontes, alces, ciervos, lobos, osos, zorros, marmotas, perritos de las praderas, coyotes, antílopes y cabras. Los vimos todos. Vale, aquello no es el valle encantado con miles de animales, pero se pueden ver. Sólo hay que pararse con el coche cuando haya mucho coche parado. Ahí están los expertos, peña que tiene unos teleobjetivos que harían palidecer a los paparazzi, y que conocen el Parque y se tiran horas esperando. Con ellos vimos lobos, pero eran como un puntito pequeñito en la lejanía (mirando por los prismáticos).
3) Cañones y cataratas
Otra de las zonas famosas es el cañón que forma el río Yellowstone. Vale, no es el Gran Cañón ni las cataratas del Niágara, pero es un cañón muy majo, con sus cascaditas, a muy pocos kilómetros de las zonas termales.
4) El lago
Un lago tremendo ocupa la esquina sureste. Está permitida la pesca deportiva, y los paisajes son de postal.
La verdad es que cualquier rincón de este Parque tiene unas vistas espectaculares. Lo único que hace falta es tiempo para recorrerlo tranquilamente.
Visitar el Parque
Ahora viene la parte negativa. El alojamiento es carísimo, dentro y fuera del Parque. Han sido los hoteles más caros que hemos pagado en todo el año, casi un 50% más caro. Y tuvimos suerte, porque la semana que hemos estado casi no había gente, y había huecos en los hoteles. La mayor parte de la gente reserva de un año para otro, ahora ya están casi llenos los hoteles y cabañas para el 2013 (los de dentro del Parque).
La alternativa para los que no quieren gastarse el dinero y visitar este año Yellowstone es ir en RV (autocaravana) o de tienda de campaña. A nosotros no nos compensaba, porque tuvimos temperaturas mínimas de -4º C y nieve, algo habitual en mayo. ¿El mejor momento? Julio. Pero debe estar hasta arriba todo, debes ir casi en procesión. Aun así, con paciencia, merece la pena.
En invierno el Parque también es una maravilla, pero hay que prepararse para temperaturas por debajo de los -20ºC. Y moverse exclusivamente en motos de nieve o autobuses preparados, porque los coches no pueden circular por las carreteras de la zona.
Lo único que no vimos, ni en carteles ni en las tiendas, es al oso Yogi. El otro día nos explicaron por qué. La productora, para no tener que pagar derechos de autor, hizo que Yogi y Bubu vivieran en Jellystone, un paradisíaco parque que aún no hemos encontrado.
En definitiva, Yellowstone es la releche. Y si a esto le sumamos que está pegado a Grand Teton, otro Parque Nacional de postal, y que la zona tiene el auténtico sabor del Far West, pues hacemos una excursión que merece mucho la pena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario